Errores comunes en mailing masivo

El mailing masivo es, sin duda, una herramienta fundamental en cualquier estrategia de email marketing.

A través de esta técnica, puedes llegar de manera directa e inmediata a tu audiencia, ofreciendo contenido relevante y atrayendo la atención de potenciales clientes.

Sin embargo, existen ciertos errores comunes en el envío masivo de correos que podrían desbaratar tu plan y generar resultados negativos, como bajas tasas de apertura, clics insuficientes e incluso el rechazo de tu marca.

A continuación, profundizaremos en esas meteduras de pata más frecuentes y te daremos consejos para evitarlas, con el fin de que tu campaña sea todo un éxito.

No segmentar adecuadamente la lista de contactos

Uno de los fallos más recurrentes en un envío masivo de emails es ignorar la importancia de la segmentación.

En lugar de mandar el mismo mensaje a toda tu base de datos, es preferible identificar varios grupos de destinatarios y ajustar la información a cada uno.

· Por qué es un problema

Cuando tu mensaje no está adaptado a las características o intereses de la audiencia, incrementan las posibilidades de ser ignorado o, peor aún, de terminar en la bandeja de spam.

· Consejo para solucionarlo

Crea distintas listas de segmentación basadas en variables como ubicación geográfica, intereses concretos, género, edades o el grado de compromiso del suscriptor.

De esta manera, podrás personalizar los envíos y ofrecer un contenido mucho más relevante.

Enviar con demasiada frecuencia (o con muy poca)

La frecuencia de envío es un factor clave en tus campañas de mail marketing.

Aunque al principio puedas pensar que bombardear a tus contactos con correos electrónicos es la forma más directa de mantenerlos atentos, la realidad es que un envío masivo exagerado puede saturar a tus suscriptores.

Por el contrario, mandar uno o dos correos electrónicos al año tampoco resultará efectivo porque tu audiencia se olvidará de ti.

· Por qué es un problema

El envío excesivo cansa, y puede provocar que los usuarios abandonen tu lista al recibir demasiados correos que no consideran relevantes.

En cambio, un envío demasiado esporádico puede arrastrar tu marca al olvido.

· Consejo para solucionarlo

Ajusta la periodicidad de tus envíos, basándote en la analítica de tu base de datos.

Observa las tasas de apertura, tasas de clic y los niveles de interacción para identificar la frecuencia ideal.

Evita caer en la tentación de ser insistente o de ausentarte demasiado, y mantén una cadencia que funcione para tu tipo de público.

Usar direcciones de envío poco confiables

Enviar correos desde cuentas genéricas o, peor aún, sospechosas, es un error típico en algunas campañas de mailing masivo.

Recuerda que muchos proveedores de correo, como Gmail o Outlook, filtran automáticamente los mensajes que consideren peligrosos, fraudulentos o que provengan de remitentes sin credenciales.

· Por qué es un problema

Un remitente dudoso genera desconfianza inmediata.

Tus correos pueden terminar en la carpeta de spam y, de esta forma, bajar drásticamente la tasa de apertura.

· Consejo para solucionarlo

Regístrate con un dominio propio y utiliza un remitente corporativo consistente.

Además, configura tu SPF, DKIM y DMARC para mejorar la reputación de tu dominio y conseguir que tus correos lleguen a la bandeja de entrada principal.

Omitir la personalización

A menudo, el envío masivo de correos electrónicos se ve perjudicado porque los redactores no personalizan los mensajes ni adaptan el contenido a cada segmento.

Simplemente, copian el mismo texto y lo remiten a toda su base de datos.

Esto genera indiferencia entre los destinatarios, ya que se sienten uno más en la lista en lugar de un cliente valioso.

· Por qué es un problema

Cuando no hay personalización, se envía el mismo mensaje genérico a miles de personas con intereses y características muy distintas.

Esto reduce la efectividad de la campaña y, a menudo, se traduce en pocos clics o interacciones.

· Consejo para solucionarlo

Usa variables de personalización (como el nombre del suscriptor) en el asunto y dentro del cuerpo del correo.

Si te diriges directamente a la persona, generas empatía y mejoras la experiencia de lectura.

En lugar de hacer un mailing masivo idéntico, añade detalles específicos que sean relevantes para tus diferentes segmentos de audiencia.

Descuidar el asunto y pre-encabezado

El asunto de tu correo es, literalmente, la primera impresión que recibe el destinatario sobre tu envío masivo.

Si es poco atractivo o no genera curiosidad, tus tasas de apertura van a resentirse.

Sumado a esto, el pre-encabezado (o preview text) es igual de esencial y aporta contexto adicional.

· Por qué es un problema

Un asunto demasiado largo, aburrido o que parezca spam, puede mandar al traste toda tu estrategia.

Por otro lado, ignorar el pre-encabezado es desaprovechar un espacio valiosísimo para conquistar la atención del usuario.

· Consejo para solucionarlo

Dedica tiempo a probar distintos asuntos y pre-encabezados.

Utiliza palabras que despierten curiosidad y evita caer en excesos de mayúsculas o signos de exclamación.

Un buen consejo es usar A/B testing para descubrir qué tipo de asunto funciona mejor con tu audiencia.

Incluir diseños poco adaptables

Si tu campaña de emailing no se visualiza de manera adecuada en dispositivos móviles, ya tienes un problema grande entre manos.

Cada vez son más las personas que revisan su correo electrónico desde sus smartphones o tabletas, y un correo que se descuadra en pantalla provoca una experiencia nefasta.

· Por qué es un problema

Un diseño que no se ajusta correctamente a pantallas pequeñas generará abandonos inmediatos, pues nadie quiere leer un correo desconfigurado.

· Consejo para solucionarlo

Asegúrate de utilizar plantillas adaptables en tu servicio de mail marketing.

Prueba tus correos en distintas resoluciones y revisa que el texto, las imágenes y los llamados a la acción (CTA) sean legibles en cualquier dispositivo.

No utilizar un lenguaje cercano e informal cuando corresponde

En ocasiones, las empresas cometen el fallo de adoptar un tono demasiado formal o que no encaja con su marca.

Esto provoca que el receptor del correo se sienta distante y no logre conectar con el contenido que se le ofrece.

· Por qué es un problema

Mantener un lenguaje poco amigable puede hacer que tus suscriptores se aburran y, en consecuencia, ignoren tus correos.

· Consejo para solucionarlo

Analiza la personalidad de tu marca y, sobre todo, comprende a tu público.

Si tu audiencia es joven y dinámica, opta por un estilo amigable e informal.

En cambio, si tu marca es más corporativa, mantén un tono profesional pero cercano, sin llegar a ser excesivamente serio.

No incluir una llamada a la acción clara

Enviar un correo masivo sin un call to action (CTA) específico es como armar un pastel y olvidar el ingrediente principal: simplemente no va a funcionar.

Muchos redactores descuidan o minimizan la importancia de un buen CTA y, al final, el destinatario no sabe qué hacer con la información que acaba de recibir.

· Por qué es un problema

Si el CTA no está claro, no se cumple con el objetivo de dirigir al usuario a una acción concreta (comprar, registrarse, descargar un recurso, etc.).

Por lo tanto tu estrategia carece de resultados medibles.

· Consejo para solucionarlo

Define cuál es el objetivo principal de tu mailing.

Si, por ejemplo, buscas que tus lectores se suscriban a un webinar, coloca un botón con un texto que genere urgencia, como “Regístrate ahora” o “Asegura tu plaza”.

Además, haz que ese CTA resalte en el diseño del correo.

Pasar por alto las métricas y la analítica

Una vez enviado el correo masivo, no acaba tu labor.

Es fundamental revisar las métricas para identificar qué funcionó y qué puntos necesitan mejorar.

La tasa de apertura, la tasa de clic, el porcentaje de rebote y las bajas de suscriptores son algunos indicadores que deberías tener en el radar.

· Por qué es un problema:

Si no analizas las estadísticas, no podrás refinar tu estrategia.

Es como disparar flechas sin saber si estás acertando en el blanco.

· Consejo para solucionarlo

Implementa un sistema de seguimiento en tu plataforma de mailing.

Examina la evolución de las métricas y prueba variantes en asuntos, diseños y horarios de envío para optimizar gradualmente tus resultados.

Descuidar la base de datos y no actualizarla

Enviar correos a contactos que han perdido interés o cuya dirección ya no existe provoca rebotes, disminuye la reputación de tu dominio y afecta la entregabilidad del envío.

Sin duda, es uno de los errores comunes de mailing masivo más fáciles de pasar por alto.

· Por qué es un problema

Una base de datos desactualizada está llena de correos inactivos o que no están interesados en tus contenidos, lo cual genera métricas engañosas y afecta tu estrategia de email marketing.

· Consejo para solucionarlo

Procura realizar una limpieza periódica de tu base de datos.

Filtra aquellos usuarios que no abren tus correos desde hace meses e intenta reconquistarlos con campañas de re-engagement.

Si no muestran interés, lo más sano para tu lista es eliminarlos, garantizando una calidad en tu base de contactos.

Utilizar asuntos engañosos o promesas falsas

Poner asuntos demasiado llamativos puede ser tentador para incrementar las aperturas, pero si el contenido del correo no responde a las expectativas, generarás una sensación de engaño y perderás la confianza de tus suscriptores.

· Por qué es un problema

Usar asuntos clickbait o mentir sobre el contenido real del correo puede lograr aperturas inicialmente, pero a la larga disminuye la credibilidad y la fidelidad de tus lectores.

· Consejo para solucionarlo

Define con exactitud qué ofrece tu correo y ajústalo a un asunto atractivo, pero honesto.

Construye poco a poco una relación de confianza con tu audiencia y evita caer en estrategias engañosas.

Olvidar la prueba de envío

Se trata de un descuido muy simple, pero que puede acarrear grandes problemas.

¿Te imaginas encontrar faltas de ortografía, enlaces rotos o diseños desconfigurados justo después de hacer el envío masivo?

Estos errores ortográficos o de maquetación pueden afectar la imagen de tu marca y disminuir el impacto de tu contenido.

· Por qué es un problema

Un correo con errores se ve poco profesional, genera dudas sobre la calidad de la empresa e incluso puede derivar en reportes de spam si contiene enlaces defectuosos.

· Consejo para solucionarlo

Siempre envía un test a tu propia dirección (o a un grupo reducido de testeadores) para verificar que todo se vea y funcione de forma correcta.

Además, revisa la ortografía y asegúrate de que los enlaces lleven a la página correcta.

Ignorar la importancia de la consistencia en tus mensajes

Cuando hablamos de consistencia, nos referimos a mantener un estilo, tono y estructura relativamente uniforme a lo largo de tus comunicaciones por correo.

Algunos planifican un mail masivo cada cierto tiempo, pero cada uno parece “sacado de una marca distinta”.

· Por qué es un problema:

Esto desorienta a los suscriptores y debilita la identidad de tu marca.

· Consejo para solucionarlo

Mantén elementos de diseño, colores y estilos que refuercen tu identidad visual.

Crea un manual de estilo que puedas replicar en todas tus campañas de email marketing, para que tus usuarios reconozcan tu marca al instante.

Subestimar la relevancia del contenido

Por último, uno de los errores comunes en mailing masivo más flagrantes es descuidar el contenido.

Muchas empresas creen que basta con mandar correos masivos de forma ocasional, sin cuidar la calidad o la pertinencia de lo que dicen.

Pero, en un mundo saturado de información, ofrecer algo de valor al usuario es la clave para destacar.

· Por qué es un problema:

Enviar correos sin sustancia o contenido repetitivo lleva al aburrimiento y a la consecuente baja de suscriptores.

· Consejo para solucionarlo

Define una estrategia de contenido clara.

Comparte novedades reales, promociones relevantes, guías útiles o consejos exclusivos que tus lectores no encuentren en otros canales.

Cada correo debería resolver alguna pregunta o necesidad de tu audiencia.

Conclusión

El mailing masivo es un recurso poderoso para llegar a tus clientes y potenciar tus ventas, pero siempre y cuando lo utilices de manera estratégica y evitando los errores comunes que hemos repasado.

La clave está en la personalización, la segmentación y la relevancia del contenido.

Además, no subestimes la importancia de la analítica y el cumplimiento legal, pues son el cimiento sobre el cual construir una relación de confianza con tus suscriptores.

Siguiendo estos consejos, podrás aprovechar de manera óptima tus campañas de email marketing y asegurarte de que tu envío masivo resulte en aperturas, clics y conversiones satisfactorias.

En definitiva, si aplicas las buenas prácticas, tu base de datos y tus ventas lo agradecerán.

¡No esperes más para optimizar tu estrategia y sacarle el máximo partido al poder del mailing masivo!