Neuromarketing

El neuromarketing es la neurociencia aplicada al ámbito del marketing o la unión entre la ciencia y las técnicas de marketing, todo ello con el fin de conocer y aprovechar los comportamientos neuronales en los procesos de compra.

Dicho de otra forma, estudia los procesos cerebrales y cómo se desencadenan, con el objetivo de medir las actividades que se llevan a cabo en el cerebro cuando existe una exposición a una estrategias de marketing concreta.

Resulta muy común que el neuromarketing y marketing emocional se confundan, aunque es cierto que ambos términos tienen relación con el comportamiento humano lo cierto que son cosas distintas.

Marketing emocional: nos desvela cómo funcionan las emociones y cómo nos llegan a afectar en el momento tomar una decisión de compra. Aborda procesos psicológicos menos objetivos.

Neuromarketing: está centrado en el propio cerebro y en su funcionamiento. Mide las reacciones de los usuarios ante un estímulo, los cambios cerebrales o físicos que ello les genera.

Teniendo en cuenta los sentidos del consumidor que se ven implicados en el proceso, se distinguen tres tipos de neuromarketing:

Neuromarketing visual

Es el que se basa en los estímulos visuales que recibe el cerebro del consumidor. Siendo uno de los mas importantes dado que los estímulos visuales son los que mas rápidamente se interpretan por el cerebro. El uso de palabras como gratis, oferta, descuento; uso de colores concretos para estimular (azul para productos frescos) o mostrar los precios de la forma “0,99″, son unos recursos muy sencillos de neuromarketing visual.

Neuromarketing auditivo

Es el basado en los estímulos auditivos para influenciar a los consumidores. Generalmente se hace uso de recursos sonoros, como la música, para influenciar en la experiencia de compra. Por ejemplo, en muchas tiendas de ropa se usa musica electrónica o relajada en función de su buyer persona.

Neuromarketing kinestésico

Es el que se basa en los estímulos que se pueden ofrecer para el sentido del tacto, el gusto y el olfato. Si bien, su puesta en practica es mucho mas reducida pues resulta muy complicado de medir sus resultados. Es usado, por ejemplo, en cafeterías donde ponen aroma a café en el ambiente de forma artificial, o en tiendas de artículos de piel (que añaden olor a cuero al ambiente).

En comparación con el marketing tradicional y otras técnicas de marketing, el neuromarketing tiene un ventaja competitiva muy valiosa: permite conocer con mayor precisión cómo captar la atención del público objetivo.

Pero esa no es la única ventaja de aplicar el neuromarketing, aquí te mostramos el resto:

• Aporta mayor precisión. El neuromarketing es objetivo en los datos, tanto en los datos propios del comportamiento como a la hora de desentrañar los pensamientos de los consumidores.
• Ayuda en el punto de venta. Gracias al neuromarketing se conocen los recorridos de los consumidores en los establecimiento y así poder colocar productos en ciertas áreas para promover su consumo.
• Fortalece la imagen de marca. Es un factor muy valioso para que las labores de comunicación y el branding de la empresa estén alineados, y permitan que la imagen de marca o producto aumenten su valor.
• Mejora la experiencia del usuario. Al permitirnos conocer con mas precisión a nuestros consumidores nos permite estar mas cerca de ellos, para conocer sus necesidades y deseos, todo ello para mejorar su experiencia del usuario y potenciar el proceso de compra.
• Optimiza procesos. Ofrece datos relevantes sobre los estímulos ofrecidos y el efecto que ellos generan, lo que permite crear modelos de conducta y patrones que se pueden aplicar a nuevas campañas o en pro de mejorar las que estén en curso.
• Permite descubrir nuevos puntos de vista. Facilita una perspectiva diferente a los estudios de mercado tradicionales, dado que permite medir el impacto en detalles tan variados cómo la forma en la que captar la atención, vehículos para transmitir la información relevante y como crear emociones/vínculos, entre otras cosas.