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Workshop

¿Qué son los workshops? Talleres de especialización

Workshop es una palabra inglesa se traduce como taller. En el ámbito del marketing digital, los workshops son talleres de especialización donde los asistentes reciben, de forma intensiva, formación práctica y teórica sobre un tema específico que les ayudará a alcanzar un mejor desempeño de su trabajo.

En dichos talleres se cuenta con un especialista en la materia, que hace las veces de moderador, tienen una duración muy corta; no son un formato para formar a muchas personas al mismo tiempo; e incluyen un espacio para poner en práctica las enseñanzas recibidas.

1. Ventajas de los workshops

No cabe duda, al tratarse de un taller de especialización, que los workshops mejoran las capacidades y conocimientos de los que participan en ellos, pero además de ello reportan diversas ventajas:

  • Alta capacitación en un tema concreto. Ayudan a que los asistente se formen de forma intensiva y profunda en un tema muy vertical. Recibiendo una formación de alto valor.
  • Fomentan la creatividad e innovación. El taller práctico, que siempre ha de estar presente en un workshop, permite poner en practica lo aprendido y permite despertar la creatividad, así como potencias las habilidades de innovación de los asistentes.
  • Los imparten por expertos. Los ponentes son siempre expertos, lo que es garantía de recibir un aprendizaje de calidad. Además facilitan, a todos los asistentes, las bases y herramientas para un mayor nivel de aprendizaje.
  • Potencian el trabajo en equipo. Son muy útiles para que los participantes establezcan vínculos que les permitan realizar tareas de forma más colaborativa, tanto dentro como fuera del propio workshop.

2. ¿Cómo crear un workshop?

Crear un workshop no tiene que ser una tarea compleja si tienes claro los pasos a seguir. Te mostramos los principales e ineludibles, en el que sería el orden cronológico óptimo:

  • Analiza las necesidades y objetivos. Siempre has de tener en cuenta el perfil de las personas que asistirían al taller, los interés que necesitan cubrir y si podrán sacar un provecho real. También evalúa si el workshop cumplirá con los objetivos que ellos esperan del taller.
  • Elige una temática concreta. Suelen elegirse temas que aporten un cierto grado de especialización a los asistentes, así cómo los destinados a mostrar las últimas novedades sobre un asunto muy concreto, siempre planteándolos de forma que resulte atractivo.
  • Establece una duración. Aunque este aspecto es muy variable, por norma general un taller no debería de extenderse más de cuatro horas o corres el riesgo de los asistentes pierdan el interés.
  • Ofrece documentación. No importa si la ofreces en formato digital o impreso, has de facilitar todo el material oportuno para que los asistentes vuelvan a casa con la capacidad de poder ampliar la información recibida, en caso de ser necesario, y con la satisfacción de haber aprendido.
  • Define el papel del moderador. El moderador y ponente, debe ser el medio para que se produzca el aprendizaje, siendo su papel principal es el de fortalecer los conocimientos e incentivar la participación de los asistentes.
  • La parte práctica es ineludible. Siempre se ha de contar con una sesión práctica donde los asistentes puedan aplicar los conocimientos que están recibiendo. Esta parte ha de potenciar que los mismos tengan una actitud productiva para que el taller sea didáctica y divertido.
  • Define una fecha y lugar. Son dos aspectos vitales, pues la conjunción de ambos marca sí las personas podrán acudir. Al mismo tiempo, es muy recomendable que el lugar elegido este fuera del entorno laboral, para que el workshop no se asocie a esté y se cree la atmósfera de aprendizaje necesaria.