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Spam

¿Qué es el spam?

Al spam se le suelen dar múltiples acepciones, como es el caso de correo electrónico no deseado, email basura, correos no solicitados, etc.

De forma sencilla, spam es cualquier tipo de publicidad que recibimos en nuestro buzón de email y que no hemos autorizado, es decir nos llega de alguien que seguramente no conozcamos y que solo desea vendernos algo.

1. ¿Por qué existe el spam?

El spam existe por que es lucrativo y a pesar de que prácticamente todo el mundo lo detecta, existen personas que leen los mensajes de spam, lo que hace que el propósito de los emisores de spam se cumplan en algunos casos (conseguir promocionar productos o servicios)

Los orígenes del spam son tan antiguos como los del propio correo electrónico, si bien los proveedores de email (ESP) luchan para que las empresas que hacen spam no impacten en los usuarios, lo cierto es que un porcentaje del spam enviado llega y no puede ser frenado. Pues los emisores de spam buscan formulas para saltarte los filtros antispam con mayor o menor éxito.

Resulta importante matizar la diferencia entre spam y phishing: el spam busca realizar ventas mientras que el phishing ,persigue robar datos personales de los usuarios con los que conseguir importantes beneficios económicos.

2. Filtros antispam

Los filtros antispam tiene en cuenta multitud de factores para calificar a un correo electrónico como spam. Si bien es cierto que cada empresa puede aplicar localmente reglas para frenar el spam, lo mas común es que todas ellas al menos tenga en cuenta estos factores para detectar el spam:

  • Asunto. Un asunto en mayúsculas, con exclamaciones, con interrogaciones, demasiado largo o demasiado corto, es analizado con más detenimiento por los antispam.
  • Configuraciones DNS. Revisan las configuraciones DMARC, DKIM y SPF para validad que no el envio se esta realizando con los pertinentes permisos del propietario del dominio de remitente.
  • Contenido. tienen en cuenta si el texto lleva alguna tipo de términos relacionados con el mundo financiero, contenido para adultos, medicamentos, etc. El uso de acortadores también suele generar desconfianza en los filtros.
  • Diseño. Comprueban multiples aspectos del diseño en busca de parámetros sospechosos, como es el caso de imágenes con texto incrustado, muchas imágenes y poco texto editable, peso del email, etc. Reputación del dominio y remitente. El volumen de envio que se hace desde un mismo dominio y si el remitente está en el listado del contactos de destinatario (es de confianza).

3. No quiero ser spam

Nadie quiere ser spam, con ello nos referimos a ser filtrado en la carpeta spam, ni los que hacen envios legítimos, ni los spammers. Para ello premisa es ser respetuosos con las normativas locales, es decir cumplir las normativas legales en materia de envio de correo, como es el caso del RGPD europeo o CAN-SPAM americana. Unas buenas buenas prácticas básicas para hacerlo son:

  • Cuidar la lista de contactos por encima de todo. Los listados de contactos necesitan de mantenimiento, por ello si un correo es marcado como rebotado duro no vuelvas a enviarle nunca mas, procura no enviar a contactos que no hayan mostrado actividad en los últimos 3-6 meses y nunca uses bases de datos de terceras empresas o cedas las tuyas. Solo asi, tu reputación de envio se mantendrá alta y podrás evitar la temida llegada a la carpeta de spam.
  • Siempre con permiso. Solo enviar campañas de email a los suscriptores que desean recibir nuestros comunicados y que nos han autorizado para ello. Es decir, se ha de tener el permiso inequívoco de su consentimiento, para ello el uso de formularios doble opt-in es imprescindible.
  • Permitir darse de baja en cualquier momento. En los los boletines se ha de incluir la posibilidad de que el usuario cause baja en el listado de correo, en un lugar bien visible y accesible para el que recibe el email.
  • Incluir datos de contacto reales y visibles. Debe de incluirse un texto de carácter legal en los envios de correo para que el receptor pueda ejercer sus derechos según lo recogido en la RGPD o CAN-SPAM, datos de contacto reales por supuesto.